:::lo prometido es deuda:::

ohhh tanto tiempo que no escribía bueno en primer lugar mis mas sinceras disculpas por el atraso del poema que prometí en febrero (ouch!), lo que pasa es que sufrí un atentado a mi blog, me ataco un blogblocktracker y se me fue a la mierda todo el template, y el registro pero por suerte lo encontré y como tengo respaldos lo logre salvar, después de una ardua cirugía vivió y volvió con mas fuerza que nunca así que no los lateo mas, ahí va la promesa que... mejor tarde que nunca, la foto es la iglesia de perto natales recordando el viaje a punta arenas.

PD: aprovecho de dedicarle el poema a una amiga a la que he aprendido a conocer en este ultimo tiempo, usted sabe que cuenta con mi apoyo, y no solo por que apoyes mi gestión como presidente, sino por que he encontrado a una hermosa persona. weno si la quieren conocer esta en los links, por supuesto con el nombre que se merece "amiga invaluable" de invaluable valor(^^).

El primer amor es blanco. Como una estrella, como una flor de almendro, como una almendra en leche, como una piedra de arroyo, como el armiño, como los dientes de mi bien amada, como la espuma, como el marfil de un piano nuevo, como una muselina con luna, como una mano de ensueño… como el jazmín…

El primer amor huele a madreselvas, a flor de habas, a hierba con luna, a margaritas de arroyo, a molino de agua, a cera virgen, a junco, a violetas blancas, a manos en el agua, a prado con escarcha, a alba, a trigo nacido entre la sombra…

El primer amor tiene música de plata, música de fuente nocturna, de brisa entre azucenas, de voz de monja joven, de piedra en el torrente, de flauta de pastor, de olas blancas, de campanas en la madrugada, de granizo en los cristales, de las primeras sonatas de beethoven, de esquila de rebaño, de ruiseñor, de brisa sobre el trigo, de bosque por la madrugada…

El primer amor se muere como los niños, como las mariposas en invierno, como los suspiros solitarios, como las madres jóvenes, como las sombras de los buenos sueños, como los días felices, como los polluelos sin madre, como una golondrina cansada sobre el mar, como un primer amor…